VICENTE JUAN SEGURA 

POR  LA  GRACIA  DE  DIOS  Y  DE  LA  SEDE  APOSTÓLICA , OBISPO  DE  IBIZA

Teniendo presente que el Santo Padre Benedicto XVI anunció el día 11 de este mes su deseo de renunciar al ministerio de Obispo de Roma, sucesor de San Pedro, el próximo día 28 de este mismo mes a las ocho de la tarde confiando “la Iglesia al cuidado de su Sumo Pastor, Nuestro Señor Jesucristo, y suplicando a María, su Santa Madre, que asista con su materna bondad a los Padres Cardenales al elegir el nuevo Sumo Pontífice”.

Teniendo presente que la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, sobre la vacante de la Sede Apostólica y la elección del Romano Pontífice, establece en el número 84 que: “Durante la Sede vacante, y sobre todo mientras se desarrolla la elección del Sucesor de Pedro, la Iglesia está unida de modo particular con los Pastores y especialmente con los Cardenales electores del Sumo Pontífice y pide a Dios un nuevo Papa como don de su bondad y providencia. En efecto, a ejemplo de la primera comunidad cristiana, de la que se habla en los Hechos de los Apóstoles (cf. 1, 14), la Iglesia universal, unida espiritualmente a María, la Madre de Jesús, debe perseverar unánimemente en la oración; de esta manera, la elección del nuevo Pontífice no será un hecho aislado del Pueblo de Dios que atañe sólo al Colegio de los electores, sino que en cierto sentido, será una acción de toda la Iglesia. Por tanto, establezco que (…) se eleven humildes e insistentes oraciones al Señor (cf. Mt 21, 22; Mc 11, 24), para que ilumine a los electores y los haga tan concordes en su cometido que se alcance una pronta, unánime y fructuosa elección, como requiere la salvación de las almas y el bien de todo el Pueblo de Dios”

Por todo ello, y para que todos: sacerdotes, religiosas y religiosos y diocesanos, fomenten en estos días la oración personal y comunitaria, establezco las siguientes disposiciones a observar hasta la elección del nuevo Sucesor del Apóstol San Pedro:

  1. Téngase una especial oración de acción de gracias a Dios por el Santo Padre Benedicto XVI que a lo largo de estos años ha estado al frente de la Iglesia, gobernando la barca de Pedro con generosidad, por su magisterio y por su persona.
  2. A partir del momento en que quede Vacante la Sede de Pedro, en todas las celebraciones de la Eucaristía se tendrá esta petición especial en la Oración de los fieles: “Para que el Señor conceda a la Iglesia un pastor que sea testigo de Cristo y que sepa guiar a toda la cristiandad con vigilante dedicación pastoral, roguemos al Señor”. Lo mismo puede hacerse en las preces de Laudes y Vísperas, en la celebración comunitaria o individual de la Liturgia de las Horas con la siguiente fórmula: “Llena de alegría a tu Iglesia con la elección de un pastor que con sus virtudes sirva de ejemplo a tu pueblo e ilumine los corazones de los fieles”.
  3. Exceptuados los domingos y fiestas, se dirá la Misa del día, con la oración colecta de la “Misa para elegir un Papa o un Obispo” (Misal Romano, Misas y oraciones por diversas necesidades. I Misas por la Iglesia, 4).
  4. Durante la celebración del Cónclave, fuera de los domingos y fiestas, se celebrará la misa del día con las tres oraciones que contiene el Misal Romano y, en el día en que comience dicho acontecimiento, si no es domingo o fiesta, se dirá la misa completa para la elección de un Papa, con lecturas tomadas de Común de Pastores (Leccionario V).
  5. Una vez elegido el nuevo Pastor de la Iglesia universal, y hasta el siguiente domingo inclusive, se pedirá por el Papa en la Oración de los fieles de todas las misas, y en los días feriales, se recitará además la oración colecta de la “Misa por el Papa” con el resto del formulario propio del día.
  6. Durante estos días tan especiales, os invito a rezar el Santo Rosario, especialmente en familia o en comunidad, y a visitar el Santísimo Sacramento, para pedir por las mismas intenciones por las que se suplica a Dios en la sagrada liturgia antes mencionada.

Confiando en la pronta y feliz elección del nuevo Romano Pontífice, os bendigo con el afecto de siempre.

Dado en Ibiza, a 22 de febrero de 2013, fiesta de la Cátedra de San Pedro Apóstol.

+ Vicente Juan Segura,

Obispo de Ibiza 

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