La Parroquia de San Fernando – en Formentera – celebró la solemnidad de su Santo el Domingo pasado con una Misa Solemne en el exterior del templo. La misa fue presidida por D. Francisco Torres Peters, párroco de San Antonio, invitado por D. Vicente Baudillo Piedra, el párroco de San Fernando, y concelebrada por éste, D. Enrique Torres, y D. Miguel Ángel Riera. A la misma también acudió Fernando Bayón, quien fue ordenado diácono en octubre de 2020.
En la homilía, D. Francisco habló de la vida del Santo resaltando su amor a la Santísima Trinidad. Un Santo que, como señaló, ampara al pueblo de San Fernando desde 1889, cuando se bendijo la Iglesia, intercediendo por todos para que puedan vivir como hermanos, como hijos de Dios. “Su misión siempre fue la de amparar, proteger y salvar a muchos cristianos. Su imagen es un signo de una presencia viva” – añadió- señalando que no hay que quedarse en la escultura en sí.
Finalmente, pidió la intercesión de San Fernando para que ayude a todos los presentes a caminar como parroquia, como pueblo, como hijos de Dios, y como comunidad cristiana. Animó a todos los asistentes a estar a la altura, saliendo de las acomodaciones impulsados por la fuerza de Espíritu Santo para poder llegar a ser capaces de entregar la vida por los demás, ya que solo en la donación se encuentra el verdadero sentido de la existencia humana.
Al concluir la celebración, Vicente Baudilio Piedra, el párroco de San Fernando, mostró su más sincero agradecimiento al Señor por seguir manteniéndole una año más en la parroquia junto a todo el pueblo de San Fernando, a las autoridades que asistieron, al Coro Parroquial, a los Obreros de la parroquia, a la Comunidad de religiosas de Ntra. Sra. de las Nieves, y a los sonadores, entre otros, y aprovechó la ocasión para comunicar el cambio de obrero mayor, que harán a partir de ahora y cada dos años, despidiendo a Samuel para darle la bienvenida a Enrique Juan.
